Colombia pierde la guerra contra las drogas

El nuevo director de la Escuela contra la drogadicción de Colombia, el sociólogo y Constituyente, Fabio Villa, asegura que es urgente revertir este fenómeno de consumo con políticas públicas integrales.

Por: Edelmiro Franco V

Colombia 10 Julio. – Colombia está perdiendo la guerra contra el consumo de drogas ilícitas y es urgente revertir este fenómeno con políticas públicas integrales aplicables en los núcleos familiares, en los centros educativos y en la sociedad en general, aseguró el nuevo director de la Escuela contra la drogadicción, el sociólogo y Constituyente, Fabio Villa.

<>, sostuvo Villa, quien fue nombrado en junio pasado por el gobernador del departamento de Antioquia, Aníbal Gaviria.

Villa es sociólogo, candidato a Doctor en sociología jurídica, exconcejal de Medellín, la segunda ciudad más importante de Colombia y fue miembro de la Asamblea Nacional Constituyente (1991).

Las principales tareas de la Escuela Luis Carlos Galán Sarmiento, bajo la dirección de Villa son: Investigación aplicada a espacios y realidades concretas de los municipios del departamento de Antioquia, y con extensión a otras regiones de Colombia y del continente.

El reto que tiene el nuevo director de la Escuela contra la drogadicción, que lleva el nombre del líder liberal Luis Carlos Galán Sarmiento -asesinado por las mafias de la droga en 1989- es enorme y estratégico en la lucha contra las drogas, un tema presente en la agenda de la comunidad internacional.

<< La guerra contra el consumo de estupefacientes y de productos tóxicos la estamos perdiendo. Cada día aumenta el número de consumidores, en la actualidad el 4.5 por ciento de la población colombiana está en niveles de consumo adictivo.>>, subrayó Villa, quien trabaja en un plan estratégico integral de este centro de investigación aplicada en temas de drogadicción y prevención.

Según las estadísticas del ministerio de Justicia de Colombia—reveladas por el periodista Juan Gossaín en un articulo en el diario El Tiempo, en marzo del 2019— el 12, 4 % de consumidores de marihuana la probó antes de cumplir 10 años. El 11, 7 por ciento de los escolares colombianos han consumido marihuana alguna vez en sus vidas.

<< (…) La segunda sustancia de mayor consumo es la cocaína. El 69, 1 por ciento de quienes han consumido coca son ya dependientes, consumidores habituales, adictos. Así de terribles son estos números>>, apuntó Gossaín, que es uno de los mejores cronistas de Colombia.

La población escolar <>.

El crecimiento del consumo de estupefacientes es tan preocupante en el mundo, que el informe del 2019 de La Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE), recomienda mejorar los servicios de prevención y tratamiento para los jóvenes y población infantil.

Pero además la JIFE advirtió que << los derechos humanos son inalienables e irrenunciables (…) Observamos con gran preocupación las constantes denuncias de graves violaciones de esos derechos perpetradas en nombre de la lucha contra la droga.>>.

Los tratados brindan << a los Estados la posibilidad de aplicar medidas sustitutivas de la condena, la pena y el encarcelamiento que tengan por objeto, entre otras cosas, la educación, la rehabilitación o la reintegración social. Si las medidas contra las drogas adoptadas por los Estados violan las normas de derechos humanos internacionalmente reconocidas, también violan los tratados de fiscalización internacional de drogas>>

Cuando le pregunté a Villa por este crucial asunto de los derechos humanos a los que hace referencia la JIFE, fue categórico: << Los derechos humanos de los adictos a las drogas se tienen que respetar. La Escuela alertará a los órganos de control y vigilancia sobre instituciones que están violando normas, derechos humanos, incluso violando el derecho penal>>.

<< Los consumidores -dijo- son enfermos y se debe garantizar su tratamiento médico con respeto absoluto a los derechos humanos de los pacientes y sus familias, a las normas vigentes al tratamiento de los adictos>>.

Globedia/El diario colaborativo